Las transformaciones en el sistema cubano de salud pública son una forma de hacer revolución, y con el contribuimos a mejorar la situación del mundo, afirmó hoy el ministro de Salud Pública, José Ramón Balaguer.
En una intervención en la Comisión de Salud y Deporte de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Balaguer analizó los resultados del reordenamiento en la atención primaria en el sector.
La base del sistema de salud pública es la atención primaria, subrayó el titular, quien sustentó que esta esfera guarda estrecha relación con la democracia participativa.
Insistió en la necesidad de lograr que los trabajadores de ese sector le rindan cuentas al pueblo, en aras de una mayor compenetración con la ciudadanía.
Recordó que los huracanes destruyeron varias facultades de Medicina del país, pero no destruyeron el nuevo concepto de esas universidades, las cuales se trasladan todas las instalaciones del Sistema Nacional de Salud.
Celebraremos el 50 Aniversario del Triunfo de la Revolución con el permanente sentido de perfeccionamiento, sentenció Balaguer.
Expresó que los problemas de muchas naciones para garantizar la salud son imposibles resolverlos dentro del sistema capitalista.
A diferencia, consideró, Cuba dispone hoy de un método de formación médica que permitirá preparar personal en países como Kiribati, donde nuestros galenos forman a los futuros especialistas en Medicina General Integral. (PL)
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